geotube


contador de visitas para blogger por paises

sábado, 12 de junio de 2010

Ep-paña directo.

Seguro que todos hemos visto ese pograma que ponen los domingos por la tarde-noche en el que unos reporteros mas dicharacheros que la rana Gustavo se pasean por nuestra geografía como lo diría yo..., bueno, haciendo el imbécil, desgraciadamente no tiene otra forma de llamarse.
La visualización de este bodrio televisivo es otro de los momentos de masoquismo del que ya os hablé en una ocasión, no quiero incurrir en imponer mi criterio por él artículo 33 y parecer un crítico televisivo pero es que creo que realmente esta especie de magazine clama al cielo.
Se dan situaciones banales y de perogrullo puro, eso sin contar la artillería pesada del pograma que son las crónicas gastronómicas radiadas desde restaurantes y/o hoteles incluidos en las rutas que se relatan, si tuviese la tecnología adecuada me teletransportaría a la cocina del restaurante en cuestión y sacrificaría al reportero y a los cocineros por aguantalo.
La técnica de los guionistas consiste en revisar los partes meteorológicos de Ep-paña y enviar gente a lugares de climatología opuesta pa ver los dos casos, frío y calor ( o lluvia y no lluvia). También dedican una sección a pueblos en fiestas patronales o con alguna fiesta puntual relativa a matacías, oficios tradicionales o ferias medievales; hasta aquí todo parece normal si no fuese por la dinámica maratoniana que los jodios reporteros (seguramente por mandato de algún gilipollas) le imprimen a crónicas banales hasta jartar.
Van por ejemplo a algún pueblo alto con nevada abundante donde comienzan contando lo que ya todos sabemos de sobra, que en lugares altos de montaña va y nieva pal invierno. El lenguaje es el típico de relato radiotelevisado, frase fragmentada con una especie de "eh" antes de algunas palabras, ejemplo: "Fíjense la cantidad de eh-nieve, que este eh-señor, tiene en la puerta, de su eh-casa". A continuación filman como el señor tira un poco de pala para poder acceder a su vivienda y pasan al interior para alcagüetiar su nevera y despensa, como ejemplo de como hemos de pertrecharnos para largas temporadas de aislamiento:

-- Y usted ¿como se las eh-arregla cuando vienen estas nevadas?
-- Pues aquí estamos, nos sentamos, hablamos, vemos la tele...
-- (De cara a la cámara) Ya eh-saben, esto es lo que deben hacer si les eh-pilla una nevada repentina.

O sea, lo mismo que sin nieve, ¡tontalaba! (es que suele ser chica).
La rematadera es en los restaurantes, el reportero (aquí suele ser chico) dentro de la cocina apronta y estresa al cocinero en cuestión, inflándole a preguntas y toquitiándole todo el genero y herramientas. No deja ni que se vea lo que hace, porque cuando ya está algo preparándose pilla desde fuera de cuadro esa etapa del plato ya preparada de antemano y le aparca lo que estaba en proceso. Por otra parte ocasionalmente también se permite dar lecciones al chef tipo "¿Pero esto no sería mejor con...?".
Para finalizar se pone en pose de foto con el chef y parte del personal para catar el plato y hacer aspavientos y negaciones con la palma de la mano hacia la cámara y a la altura de la frente en un acto de mentira pura y dura porque casi ni lo prueba.
Ocasionalmente hacen crítica social sobre abusos urbanísticos o dejadez de las instituciones en pueblos donde cristo perdió la alpargata, ya sabéis, cosas de esas que casi nunca salen por la tele.
Que si, que ya se que de todo tiene que haber y que habrá público también para esto, ¡que síiiii!, que ya lo se, pero que ójala se revienten también, oiga.

3 comentarios:

Helter dijo...

Es que además es una fórmula sobadísima que existe en todos los países y todos los idiomas. ¿Se acuerda del personaje de Bill Murray en Atrapado en el Tiempo?

miguelgato dijo...

Perfectamente Helter, su ejemplo da de lleno en la diana.

Anónimo dijo...

En La Sexta. Lo de las casas-guays con yacusis y luces que se encienden solas al entrar en las habitaciones lo echan en La Sexta. Mola.

Tojunto